Escultura monumental de Jorge Marín llega a Tijuana y, con ella, la reflexión en torno a la niñez y adolescencia migrante

Tijuana/Ciudad de México.– La Secretaría de Cultura de Baja California, la Fundación Jorge Marín y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, UNICEF, inauguraron hoy al mediodía en la Garita El Chaparral de Tijuana, Baja California, la exhibición de la obra El ruido generado por el choque de los cuerpos del escultor y Embajador de UNICEF México, Jorge Marín.

La escultura, hecha de bronce, atrapa de inmediato la atención del espectador, pues se compone de cuatro figuras humanas –dos masculinas, una femenina y una infantil o adolescente— erguidas sobre una balsa que viaja hacia puerto desconocido. Cada uno de estos cuerpos está envuelto en tela drapeada, lo que los convierte en seres anónimos; en abstracciones que representan la historia, los sueños y la dignidad que acompaña durante su travesía a quienes por distintas razones han tenido que migrar.

Exhibida por primera vez en el año 2017 frente al Palacio de Bellas Artes de la Ciudad de México, El ruido generado por el choque de los cuerpos contaba entonces con tres figuras adultas sobre la embarcación. Fue hasta noviembre del 2021, una vez instalada en el Parque Central Miguel Hidalgo de Tapachula en Chiapas, cuando se hizo presente la cuarta figura que representa la silueta de una niña, niño o adolescente. 

Para Jorge Marín, esta escultura busca “abrir un diálogo que nos permita acercarnos solidariamente, desde el arte, a las motivaciones y esperanzas que impulsan a quienes han optado por desplazarse -a causa de muy diversas circunstancias- de sus lugares de origen”.

“Me interesa, sobre todo, enfocarme en los niños, niñas y adolescentes –agregó Marín—, en la preservación de sus derechos, en el respeto a su dignidad e integridad. Con esa finalidad trabajamos conjuntamente desde mi Fundación con UNICEF”.

El impacto artístico y social de esta escultura es mayor en el contexto de Tijuana, una de las tres ciudades de la frontera norte de México –junto con Mexicali y Ensenada— que cuentan con más población en situación de movilidad, compuesta en gran parte por niños, niñas y adolescentes.

Por su parte la Secretaria de Cultura, Alma Delia Ábrego Ceballos destacó que “no hay rincón más especial para vivir en carne y hueso esa metáfora que esta esquina de la patria, la puerta de Latinoamérica, donde los sueños que rebotan se quedan y hacen más grande a nuestra tierra.  Donde todos los días cientos de personas, niñas, niños y adolescentes, llegan aquí con ganas de superarse y seguir sembrando futuro y es nuestra responsabilidad atender esa demanda”.

En el marco de esta inauguración también se llevó a cabo el taller “¿De dónde viene tu familia? Navegando mi imaginación”, en el que se organizan equipos conformados por niñas, niños y adolescentes para recrear, con papel y diversos materiales reciclados, la balsa de la escultura, con la finalidad de que los niños doten de identidad a sus tripulantes, siempre partiendo de sus experiencias personales e identificando como personajes a sus amigos, familiares, mascotas o cualquier otra figura que les evoque un sentido de pertenencia.

“En donde quiera que se encuentren, todos los niños, niñas y adolescentes tienen derecho a una educación de calidad, a ser protegidos frente a toda forma de violencia y explotación, y al acceso a todos los servicios que garanticen su bienestar, sin importar su condición étnica, social o migratoria”, señaló durante la presentación Maki Kato, Representante Adjunta de UNICEF en México.

“Tijuana es un lugar de origen, tránsito, destino y retorno de miles de niñas, niños, adolescentes, adultos y familias enteras que se desplazan en búsqueda de una vida mejor, quienes además enriquecen a las comunidades de acogida con sus tradiciones y costumbres haciendo de esta ciudad un lugar encuentro entre culturas”, agregó Maki Kato.