Ishmael Beah, embajador de buena voluntad de UNICEF, visita México para dialogar con niñez afectada por violencia armada

Hablaron de la violencia y el peligro que enfrentaban en casa debido al crimen organizado, la decisión de huir de sus comunidades para dirigirse al norte.
Ciudad de México/ Nueva York.- Ishmael Beah, Embajador de Buena Voluntad de UNICEF, viajó la semana pasada a Tijuana y la Ciudad de México para reunirse con niños, niñas y familias desplazadas internamente que huyen de la violencia armada.
Durante su visita a Tijuana, en el norte de México, Beah, autor de best sellers y activista de derechos humanos que fue reclutado a la fuerza por un grupo armado durante la brutal guerra civil en su país natal Sierra Leona, a la edad de 13 años, habló con niñas, niños, adolescentes y sus cuidadores sobre sus experiencias. Ellas y ellos hablaron de la violencia y el peligro que enfrentaban en casa debido al crimen organizado, la decisión de huir de sus comunidades para dirigirse al norte y los desafíos a los que se han enfrentado desde entonces, tanto en sus peligrosos viajes como en su esfuerzo por establecer un futuro más esperanzador.
Según datos del Centro de Monitoreo de Desplazamiento Interno (IDMC, por sus siglas en inglés), se estima que en 2022 hubo 113,000 niñas y niños en México en situación de desplazamiento interno a causa de violencia y el conflicto. Esto es más del doble de los 56,000 niños estimados en 2002. En los últimos dos años solamente, se registraron más de 38,000 nuevos desplazamientos debido al conflicto y la violencia, de los cuales se estima que 11,000 involucraron a niños.
"Hay muchas similitudes entre las historias que me compartieron en México, mi propia historia y las que he escuchado en otras partes del mundo", dijo Beah. "En tan solo cinco días, conocí a muchos niños mexicanos afectados por la violencia armada y el reclutamiento forzado por parte del crimen organizado. Sé que hay decenas de miles más. Los contextos pueden ser diferentes de un lado al otro del mundo, pero el impacto devastador de la violencia en los niños y niñas sigue siendo el mismo. Todos estos niños y jóvenes quieren vivir sin el miedo constante y las pérdidas".
Muchos de los niños y familias que Beah conoció lograron escapar de ser obligados a unirse al crimen organizado, de ataques a comunidades, secuestros, extorsiones o la pérdida de sus medios de subsistencia. Muchos de los niños y niñas que huyen de la violencia armada lo hacen solos. UNICEF brinda asistencia humanitaria a lo largo de su viaje y trabaja para reunir a estos niños con sus familias.
"El grado de violencia ejercida por los grupos del crimen organizado resulta en graves violaciones de los derechos fundamentales de los niños y adolescentes, y compromete profundamente sus posibilidades de convertirse en adultos funcionales que contribuyan positivamente a la sociedad", dijo Fernando Carrera, Representante de UNICEF México.
“Prevenir y atender a la problemática del reclutamiento infantil requiere de esfuerzos coordinados que atiendan las causas estructurales que sostienen la violencia y generar factores protectores para ellas y ellos, tales como la permanencia en las escuelas, una crianza positiva y amorosa, ofertas culturales que promuevan la paz y la cohesión social”.
El IDMC señala que, en el caso de México, la mayoría de los desplazamientos ocurrieron debido al conflicto y la violencia, principalmente en los estados de Michoacán, Guerrero y Chiapas, pero también en Chihuahua, Durango, Jalisco, Nayarit, Oaxaca, Tamaulipas y Zacatecas. La violencia criminal representó el 95% de los desplazamientos internos registrados.
A esta situación se suma un riesgo adicional: ya sea debido al desplazamiento o al contexto en el que viven en sus comunidades, según algunas organizaciones de la sociedad civil, entre 145,000 y 250,000 niñas, niños y adolescentes están en riesgo de ser reclutados o utilizados por grupos del crimen en México, según la Red por los Derechos de la Infancia en México (REDIM).
Los niños y niñas se convierten en parte de grupos del crimen armado por diversas razones. Algunos son secuestrados, amenazados o coaccionados, mientras que otros, impulsados por la pobreza, se ven obligados a generar ingresos para sus familias. Algunos niños pueden asociarse con el crimen organizado para sobrevivir o proteger a sus comunidades. Sin importar su participación, el reclutamiento y uso de niños por parte de grupos del crimen viola los derechos fundamentales de los niños a vivir libres de violencia y explotación.
El Gobierno de México estableció recientemente un organismo nacional para prevenir el reclutamiento de niños por parte del crimen organizado, reconociendo el problema como un importante desafío de política pública por primera vez. Asegurar que los niños sean reconocidos como víctimas de violaciones de derechos por parte de estos grupos, allana el camino para que accedan a un trato más justo, con un enfoque en su protección y cuidado, y la restitución de sus derechos. UNICEF está apoyando al Gobierno para traducir estos esfuerzos en la primera política nacional en México sobre el reclutamiento de niños por parte del crimen organizado, la cual establecerá servicios integrales de prevención, liberación y reintegración para los niños afectados.
"Todo reclutamiento de niños en violencia armada es forzado, y siempre son víctimas, independientemente de si son reclutados para unirse a una guerra o al crimen organizado", comentó Beah. "Los grupos criminales les roban su infancia, los exponen a formas extremas de violencia, comprometiendo seriamente su futuro, bienestar y vidas. Incluso después de huir, siguen estando en riesgo y amenazados constantemente. Anhelan aprender y asistir a la escuela, tener una vida normal y poder convertirse en lo que sueñan. Incluso en estas circunstancias difíciles, tienen esperanza en lo que pueda venir. Los niños reclutados necesitan atención especializada para que puedan superar sus terribles experiencias, reconstruir sus vidas y aprender a ser niños nuevamente".
Notas para editores:
- El Centro de Monitoreo de Desplazamiento Interno (IDMC, por sus siglas en inglés) registró 386,000 personas desplazadas internamente como consecuencia del conflicto y la violencia en México a finales de 2022, de las cuales UNICEF estima que 113,000 eran niños.
- El IDMC también registró aproximadamente 38,000 nuevos desplazamientos en los últimos dos años (2021: 29,000; 2022: 9,000), de los cuales UNICEF estima que 11,000 involucraron a niños (2021: 8,600; 2022: 2,700). Es importante tener en cuenta que estos números se refieren a eventos de desplazamiento y no pueden ser equiparados con el número de personas desplazadas. Una misma persona puede ser desplazada más de una vez en eventos separados.