PNUD y ONU Mujeres buscan impulsar la autonomía económica y empoderamiento de mujeres en Estado de México, Jalisco y Puebla

Ciudad de México- En el marco de la alianza entre el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en México y ONU Mujeres en México, el pasado 7 de septiembre comenzó la implementación del modelo de inclusión financiera del PNUD, en el marco del programa de “Segunda Oportunidad” de ONU Mujeres, con el objetivo de fortalecer la resiliencia y salud financiera de 200 mujeres provenientes de Jalisco, Puebla y del Estado de México.

El modelo de inclusión financiera del PNUD, además de brindar educación financiera con perspectiva de género, busca acompañar y asesorar a las mujeres para que puedan obtener y utilizar productos financieros que vayan acorde a sus necesidades. En particular, se espera que, al finalizar las 10 sesiones, las mujeres cuenten con los conocimientos, habilidades que les permitan aumentar su resiliencia, mejorar su calidad de vida y alcanzar autonomía económica, impulsando así su empoderamiento.

En México, la brecha de inclusión financiera entre hombres y mujeres es de 12.4%, (ENIF, 2021). Sin embargo, estas brechas aumentan si consideramos los tipos de localidad y los diferentes productos financieros. Por ejemplo, solo 2 de cada 10 mujeres que viven en zonas rurales cuentan con algún tipo de seguro, lo que las pone en una situación de mayor vulnerabilidad ante un evento inesperado, como lo fue la pandemia de la COVID-19. Esto refleja la situación de desigualdad y rezago a la que se enfrentan las mujeres en el sector financiero.

De acuerdo con la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (ENIGH 2018), de la población de 15 años y más, 6 de cada 10 personas sin educación son mujeres. En este contexto, el programa “Segunda Oportunidad” de ONU Mujeres busca generar las condiciones para que las mujeres mexicanas en situación de vulnerabilidad puedan: regresar a la educación formal, obtener un empleo o iniciar un negocio. Para ello, hace frente a los estereotipos y prácticas discriminatorias, que persisten en nuestras sociedades, y que son causa y efecto de la desigualdad que viven las mujeres en el acceso a la educación, en la falta de ingresos propios o del control sobre los mismos, de la violencia contra las mujeres, de los matrimonios de niñas y adolescentes, entre otros desafíos.

Actualmente, Segunda Oportunidad se implementa en Australia, Camerún, Chile, Jordania, India y México, y busca lograr los siguientes resultados:

• Acceso de las mujeres a contenido y material educativo de alta calidad, considerando el desarrollo humano, la educación digital y con esta alianza la Inclusión Financiera, como ejes transversales. Hoy más de 5000 mujeres se han graduado de Segunda Oportunidad.
• Incrementar el acceso de las mujeres a oportunidades de empleo y de emprendimiento para mejorar su calidad de vida. De las mujeres graduadas el 20% continuó con sus estudios, 42% han emprendido un negocio y el 12% han logrado emplearse.
• Erradicación de los estereotipos que reducen el acceso de las mujeres a oportunidades educativas y de ingreso económico. Se han realizado 198 actividades con las comunidades que promueven una transformación cultural.
• Fortalecimiento y mejora de los marcos normativos y presupuestales multisectoriales para facilitar el acceso de mujeres a oportunidades educativas y de empleo. Más de 5 gobiernos estatales y municipales han fortalecido sus políticas de desarrollo económico en favor del empoderamiento de las mujeres.

Por su parte, desde 2020, el PNUD en México ha implementado programas de inclusión financiera que son únicos en su tipo, ya que transversalizan la perspectiva de género, lo que permite considerar las desigualdades y discriminaciones por género y así proponer una visión, aprendizajes y soluciones más integrales e inclusivas. Este modelo ha permitido aumentar la salud financiera de más de 300 mujeres en Hidalgo, Chiapas y el Estado de México.

El Sistema de las Naciones Unidas impulsa el logro de la igualdad de género y de la Agenda 2030 en México, a través de la coordinación del trabajo interagencial, que en este caso se fortalece con la transferencia la metodología del PNUD en México al programa “Segunda Oportunidad” de ONU Mujeres.