Observaciones del Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, al diálogo del alto niel de las Américas sobre Acción Climática
Guterres: Cuento con los países de ALyC para enviar una señal contundente a la COP26 de que podemos lograr un futuro neto cero resiliente.
Nueva York (Naciones Unidas).-
Me complace unirme a tan distinguida compañía en esta importante reunión.
Al reunir a las Américas para discutir sobre la acción climática, están manifestando el espíritu de cooperación multilateral que todos necesitamos.
Faltan menos de 60 días para la COP26.
Tenemos que actuar conjuntamente, de consuno, para superar el actual estancamiento.
Muchos países de la región ya están mostrando su ambición a la hora de reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero y trabajando para adaptarse a las alteraciones climáticas, incluso mientras se enfrentan a los efectos sociales y económicos de la pandemia de COVID-19.
Seguiré defendiendo que la arquitectura internacional de financiación del desarrollo debe ofrecer opciones que vinculen la acción climática con la sostenibilidad de la deuda a fin de crear puestos de trabajo y aliviar las dificultades de la deuda.
Sepan que cuentan con el pleno apoyo del sistema de las Naciones Unidas para hacer frente a la triple amenaza del COVID-19, el cambio climático y la deuda.
En 2021, es fundamental alinear los paquetes de recuperación del COVID-19 con el objetivo de 1,5 grados de temperatura y promover la resiliencia frente a las consecuencias del cambio climático.
A medida que nos acercamos a la COP26, quiero destacar tres áreas esenciales en las que debemos centrarnos.
En primer lugar, debemos mantener a nuestro alcance el objetivo de 1,5 grados.
En la actualidad, nos encontramos muy lejos de lograrlo.
Las promesas de alcanzar emisiones netas de valor cero para 2050 deben ir acompañadas, mucho antes de la COP26, de ambiciosas Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional con metas para 2030.
Los compromisos deben integrarse en los marcos normativos, políticos y legislativos para acelerar la transición a cero emisiones netas y el abandono de los combustibles fósiles.
El uso del carbón debe ser eliminado inequívocamente a más tardar en 2030.
Las naciones de América Latina y el Caribe, al igual que la mayoría de los países en desarrollo, necesitan apoyo para llevar a cabo una transición hacia las energías renovables y las economías resilientes.
Una transición justa conlleva garantizar que las trabajadoras y los trabajadores de los sectores con altas emisiones de carbono y relacionados con los combustibles fósiles tengan opciones alternativas dignas, cuenten con apoyo para la reconversión profesional y dispongan de redes de protección social.
En segundo lugar, necesitamos un gran avance en materia de adaptación y resiliencia.
Hago un llamamiento a los donantes y los bancos multilaterales de desarrollo para que asignen al menos el 50% de su apoyo climático a este fin.
La adaptación sigue siendo la mitad olvidada de la ecuación climática, con solo el 21% de la financiación climática dedicada a ella.
Los países en desarrollo ya necesitan $ 70 mil millones de dólares al año, y esa cifra podría más que cuadriplicarse a fines de esta década.
En tercer lugar, las naciones desarrolladas deben cumplir con la agenda de solidaridad.
Eso significa apoyo a los países en desarrollo en materia de vacunas, deuda y liquidez, así como financiación climática.
Necesitamos un plan creíble para cumplir con el compromiso de $ 100 mil millones de dólares hecho hace más de una década.
Lo necesitamos mucho antes que Glasgow, para restaurar la confianza.
Y necesitamos que los bancos multilaterales de desarrollo alineen sus carteras con el objetivo de 1,5 grados.
Eso significa aumentar sus carteras de adaptación, facilitar el acceso a la financiación climática y estar preparados para asumir más riesgos.
Excelencias,
Para finalizar, felicito el liderazgo de los países de América Latina y el Caribe en la acción climática.
Cuento con ustedes para enviar una señal contundente a la COP26 de que podemos lograr un futuro neto cero resiliente.
Gracias.